O Consumo Colaborativo

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Según estos autores, esas plataformas promoverían una distribución de renta más equitativa y sostenible, al reducir no sólo el costo de acceso a productos y servicios, sino también la demanda por la posesión de activos.

Y a través de estos conceptos de innovación del modo de compartir que surgen modelos y startups en todo el mundo que validan este modelo creativo y estimulador de trabajar con el consumo colaborativo:

Tem Acucar (Brasil)

Imagínese que usted acaba de mudarse de casa y necesita instalar estantes y cuadros, pero no tiene un taladro. La idea de comprar una parece inicialmente la solución, pero usted sabe que probablemente no utilizará la herramienta durante mucho tiempo y que se guardará en algún rincón. Al final, lo que usted necesita no es de un taladro, sino de agujeros en la pared. Para resolver este tipo de problema, la estudiante Camila Carvalho, de 27 años, creó el “Tem Açúcar”, una app gratuita con la propuesta de hacer que las personas de la propia vecindad compartan sus productos domésticos y herramientas.

Uber

Red de conductores privados instaurada en diversas ciudades del mundo. A través de una aplicación instalada en el smartphone, el usuario puede solicitar un coche para su transporte, similar al servicio de taxi. Está presente en más de 68 países, y tiene un valor de mercado de US $ 51 mil millones.

Airbnb

El Airbnb es un sitio que ofrece la conexión entre personas que están buscando alojamiento para pasar las vacaciones y las que están ofreciendo estancia. En la actualidad, en 190 países y con un valor de mercado de 25.500 millones de dólares, esta "red social", ofrece más que simples estancias, el Airbnb también ofrece alojamiento que va desde una simple habitación hasta castillos en Galway, Irlanda.

Blimo (Netflix de ropas)

BLIMO es como un Netflix sólo que de ropa. Usted paga un precio fijo por mes y puede usar la ropa del acervo, es como un vestidor fuera de casa ". El sitio ofrece tres planes diferentes para convertirse en un miembro. El más barato es el platino en el que la cliente paga 110 reales al mes y puede llevar a casa una pieza y quedarse con ella durante un plazo máximo de diez días. Sin embargo, no es necesario esperar hasta el final de ese período para cambiar la ropa. El cliente puede elegir un nuevo look de la arara tan pronto como devuelva la pieza anterior (se lava, según el reglamento). Teóricamente puede elegir cada día una pieza diferente.

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